En el mundo de los ignorantes, los impostores logran manipular a las
masas.
El desconocer las leyes naturales, como las civiles, crea seres
marginados, que necesitados de respuestas, acaban en manos de
personajes sin escrúpulos que explotan estas carencias para su provecho.
Por ello, se necesitan leyes, que amparen y defiendan a las
personas, de estos individuos.
La democracia, por primera vez en muchos siglos, termina con
aquellos mandatarios absolutistas, que han pisoteado a los seres
humanos en base al poder de la fuerza en contra del poder de la razón.
Se habla mucho de personas que no aceptan el poder del clero, de una
manera negativa, como si atacar el excesivo poder en manos
sacerdotales fuera un signo intolerante, en vez de algo lógico en
una democracia, donde no debe de haber poderes paralelos.
Los ateos, como los creyentes, tenemos derecho a vivir nuestras
vidas según las leyes que libremente nos hemos dado.
Las ideas religiosas que tratan de imponerse, por encima de las
Leyes constitucionales, deben de ser colocadas en su justo lugar.
Para mi las personas, merecen todos los respetos, pero aquellos que
fuera del marco democrático, tratan de imponer sus ideas sobre
temas, que regulan nuestras libertades en contra de nuestras leyes,
alegando un conocimiento divino, con poderes celestiales falsos,
solo merecen desenmascararlos.
La Jerarquía Católica que sigue confundiendo a Dios con ellos
mismos, debe no solo devolver, todo el patrimonio que con malas
artes ha robado al pueblo sino que además sus leyes canónicas no
tiene que tener vigencia en nuestro derecho civil.
Respeto sus personas, pero no puedo estar de acuerdo con sus actos
en contra del ser humano.
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WEB:
http://jerarquiacatolica.blogspot.com
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