El pueblo español tiene que aguantar a cuentistas poderosos que
pisotean nuestros derechos, contándonos bellos cuentos,durante
siglos:Y estos son corona y clero.
Y los cuentos pueden empezar así:En un lugar de oriente de cuyo
nombre no quiero acordarme, nació un mesías, para salvar al mundo
del pecado y de la condenación eterna y nos envió por todo el Mundo,
para dar la buena nueva, adoctrinar e imponer esta maravilla
cristiana para mayor gloria de Dios y la salvación de las almas,
pero eso si, por la fuerza de las armas, pues las personas, tienen
la manía de no dejarse salvar y hacen de su capa un sayo, en vez de
obedecer, lo que les mandamos.
En nuestro imperio no se ponía el Sol,y gracias a este bello cuento
nuestros mandatarios, disponían de riquezas expoliadas a todas las
colonias, pues el esfuerzo de este bello cuento necesitaba de
magnificas catedrales, basílicas,monasterios, palacios e infinitas
construcciones, para que los pueblos conquistados, pudieran admirar
todas las maravillas del arte sacro español y así quedarse
enamorados del cuento de salvación español, para la vida eterna.
Se les decía; Ahora vivís mal, pues la vida es un valle de lágrimas,
pues dios os castiga debido a vuestra maldad, pero nosotros los
cristianos, os prometemos una vida maravillosa,en el más allá ,pues
resucitareis en el cielo,si hacéis, lo que os decimos rememorando
el cuento de la carretilla, que el rico iba a prestar al pobre, por
el trabajo gratis, que hacía en su finca y que nunca le prestó.
Y colorín colorado, la princesa Cristina y su esposo Urdangarin
vivirán felices comiendo perdices, y Benedicto XVI será santificado.
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