lunes, 11 de febrero de 2013

Tal como dijimos Benedicto XVI dimite

Desde junio de 2012 en mi carta:Los cuervos vuelan sobre el
vaticano, todo apuntaba, que su muerte estaba cerca, o bien que su
salud no le permitiese seguir, la cantidad de problemas, que la
propia curia romana le estaba produciendo.

Desde el principio de su pontificado, Benedicto XVI demostró no
estar a la altura de lo que la iglesia católica necesitaba, después
del largo pontificado de Juan Pablo II, que supuso un freno a la
apertura de la Iglesia a la sociedad moderna.

Benedicto XVI no pudo o no supo, frenar la pederastia,ni los cismas
que afloran,ni a las sectas que emergen como setas en la dictadora
institución religiosa.

Todos los escándalos que poco a poco afloran, por los nuevos medios
de información, como los secuestros de los niños, quitados a
familias "rojas" y dados a familias cristianas,en varias naciones,
como en Argentina. o en España, los millares de casos de pederastia,
los cismas, de la teología de la liberación para apoyar más a los
pobres, o de Hans küng al no reconocer a la santísima trinidad
católica, o la de Monseñor Lefreve de no aceptar las conclusiones
del Concilio Vaticano II, e incluso que no supo solucionar a las
nuevas sectas dentro de la institución como el Opus y los Kikos que
están más cerca de Lutero, que de las doctrinas vaticanistas.

Tampoco ha sabido conjugar ciencia y fe cristiana, siendo superado
por el ADN y todos los adelantos científicos sobre sexualidad y
mucho menos contestar al problema que le surge con el bosón de
Higgs, que reconoce que el universo, no ha sido creado pues existe
desde siempre, como energía que es y que nunca desaparecerá, por lo
que o es el verdadero Dios energía o no existe ningún dios, que haya
creado de la nada, todo lo que vemos y tengan razón los ateos.

Por fin este teólogo de pacotilla,ha dimitido ya que se ha dedicado
desde el principio de su pontificado a tirar balones fuera, y ha
conseguido hacer reír a media humanidad....la verdad que lo echare
de menos ,me ha dado muy buenos momentos humorísticos, otro dictador
menos, gracias a Dios.

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