domingo, 28 de abril de 2013

Juan Manuel de Prada y sus ideas cristianas

Contra la idea de considerar el cuerpo una cárcel en la que yacemos
postrados se alzó el cristianismo con una idea nueva y subversiva.

Esta frase llena de esperanza que magnifica el cuerpo del ser
humano, de Juan Manuel de Prada,falla en todo lo relativo al
cristianismo entendido, como lo explican los que se dicen herederos
y vicarios de Cristo.

Juan Manuel de Prada continua: Nuestro cuerpo tan tentado,por las
debilidades tan acechado por lo padecimientos y los achaques deja de
ser un fardo oprobioso que nos separa de una vida más plena para
convertirse en recipiente de la divinidad.Nuestro cuerpo cuyo
destino aparente es la muerte,se hace participe de la naturaleza
divina, aprendiendo que ese destino de males y muerte, es un
espejismo un trance a una vida más plena y la glorificación de la
carne convocada a la resurrección.

Lo que en verdad encrespa y escandaliza a los sabios de Atenas es
que San Pablo ya no considera el cuerpo un problema sino el
recipiente necesario para la plenitud y gloria eterna....ese cuerpo
que se muere,y se pudre y que sin embargo ha nacido para la
gloria...eso si es una idea nueva y subversiva.

Juan Manuel de Prada, fanático cristiano, verdaderamente cree
aquello que manifiesta, equivocando conceptos y poniendo medallas a
una falsa idea religiosa cristiana.

Primero: El cuerpo no es recipiente de la divinidad, es la misma
divinidad hecha carne, ya que el verdadero Dios es energía que se
trasforma en materia y esa carne vuelve a ser energía, lo que
invalida que el cuerpo pueda tener una vida plena, pues solo es una
manifestación de Dios energía, y que nunca puede ser eterna, pues
solo es eterno Dios.....no su trasformación material.

Segundo: La idea negativa del cuerpo humano, solo se debe a un
ignorante conocimiento del mismo, ya que ver solo como nace, crece
se desarrolla y muere, es desconocer, que el cuerpo es energía
condensada, una trasformación de la divinidad energía, que volverá a
ser Dios energía.

Tercero y último : Los sabios de Atenas, desconocían la gloria del
cuerpo humano, y consideraban el cuerpo un problema de enfermedades
y limitaciones, considerando que liberarse de el, era llegar a la
plenitud, idea menos equivocada que la del ignorante San Pablo, que
creía todo lo contrario,mitificando el cuerpo, que consideraba
recipiente de dios Cristo, que resucitaba eternizando sus miserias
en una falsa gloria. Así pues el cristianismo que mitifica el
cuerpo, descansa en una mentira teológica.... solo Dios energía es
eterno, no el cuerpo humano, que solo es una trasformación divina.

Dios es UNO, Alfa y Omega principio y fin de Todo...por lo que
todos somos Dios y no necesitamos de falsas religiones que pisotean
los derechos humanos para su beneficio.


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