El pensamiento desde una óptica particular, como en el dicho sobre
el bosque, nuestro árbol nos impide ver la realidad del bosque de la
vida.
Luis hace un bello análisis de las diferencias entre nacer pobre y
tonto a nacer rico y listo.
El señor Beguiristain defiende la reencarnación como una solución a
sus ideas sobre la desigualdad en los seres humanos, pues con lógica
humana y por desconocimiento, no puede comprender que en una sola
vida, unos tenga buena suerte y otros mala, unos nazcan con todo de
cara y otros lo hagan con todo de culo.
La falsa idea de la reencarnación le soluciona el problema injusto
de la desigualdad, cuando nuestros pensamientos nos inclinan a creer
en la igualdad para todos.
No es justo que Dios en su infinita bondad de a unos mas o menos que
a otros, tanto en riqueza material, mental o espiritual ¿Entonces si
esto ocurre y la reencarnación no existe como solucionamos este
problema teológico y humano?
El cristianismo no admite la reencarnación como solución, al
problema de la desigualdad en los seres humanos, deja la solución
para el más allá, donde Dios hará justicia, cosa que en el acá el
problema queda sin resolver.
Las dos ideas parten de una equivocación: En no ver la vida desde
una óptica global y elevada y verla desde una particular conciencia,
por lo que ser juez y parte lleva al error, Dios hace de sí mismo el
Universo, nada hay fuera de El, todos somos El.
Para ver esa realidad debemos de elevarnos ha estados
trascendentales de conciencia,con la meditación trascendental y así
vemos el problema desde fuera, sin involucrar nuestro ego, que
trastorna nuestro juicio. con la claridad que da la visión armoniosa
del Universo, creado y dirigido por la mente más genial que existe y
sin ningún fallo.....todo está bien hecho querido Luis, solo nuestra
mente limitada no es capaz de verlo.
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WEB:
http://jerarquiacatolica.blogspot.com
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