domingo, 8 de diciembre de 2019

Por el cambio climático

Hemos llenado el mundo de luz de navidad, millones y millones de bombillas, encendidas durante más de un mes, pero para hacer el paripe apagamos unos minutos las luces de navidad, y así contribuimos para frenar el cambio climático......

Somos increíbles, no podemos frenar, nuestra forma de vida, pero hacemos gestos, que no resuelven nada, y que nos dejan más tranquilos, suponiendo que somos ecologistas, que por unos instantes, contribuimos a no  contaminar nuestra atmósfera.

La navidad un mito religioso donde celebramos la venida del hijo de un falso dios a la tierra, llena de actos llenos de fantasía, como ángeles que se aparecen a los pastores, para darles la buena nueva: Os ha nacido un mesías, un salvador del mundo, hijo de dios y de una virgen humana, llena de virtudes, nacida sin pecado y llena de grandeza!Aleluya!

Donde tres reyes magos, llegados de oriente, siguiendo a una estrella guía, que se mueve en el cielo, mejor que un cometa, teledirigida, por un dios padre con barbas, que ama a los humanos, que no le hacen caso y le desobedecen, pero el incansable, les perdona una y otra vez hasta enviarles a su propio hijo, tenido con una diosa guapísima.....para intentar salvarles, de sus propias iras, que les condena, por desobedientes a infiernos eternos !Que bien!

Los reyes le entregan incienso, oro y mirra, para afirmar, que es todo un maravilloso niño, que nació como un rayo de sol sin manchar ni rasgar, no como los demás niños sucios y dañinos, que asco damos los que hemos nacido normales y verdaderos niños.

Gracias a este falso dios, tenemos unas fiestas, mejor que las saturnales y podemos disfrutar de regalos y comidas sin fin, Cristo es un gran invento no podemos dejar que desaparezca.

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